Informe preliminar de la Caravana por la Paz
la Vida y la Permanencia en el Territorio
Os compartimos el informe preliminar de la Caravana por la Paz, la Vida y la Permanencia en el Territorio, que tuvo lugar entre el 23 de julio y el 23 de agosto, recorriendo el Oriente antioqueño, el Sur de Bolívar, Arauca, Chocó, Valle del Cauca y Cauca. La Caravana la constituyeron 187 participantes de 14 nacionalidades, que contaron con el acompañamiento en las diferentes regiones por al menos 128 miembros de las guardias campesinas, indígena y cimarrona.
Recogemos más abajo algunas de las conclusiones de lo observado.
Hemos observado, y ha sido un clamor de las comunidades, que:
• Los grupos paramilitares están intentando y en muchos casos consiguiendo el control de procesos organizativos de las comunidades, se han infiltrado en ellas, ocupando cargos en las estructuras de autogobierno, como las Juntas de Acción Comunal. Todo ello con un supuesto contenido social, a través de ONGs de derechos humanos y de desarrollo comunitario, que les sirven como fachada. Para ello cuentan con el temor que persiste en la población, impuesto desde hace varias décadas, en complicidad con determinadas autoridades civiles, políticas, militares y administrativas.
• Hay asedio y hostigamiento contra líderes y lideresas de las comunidades con el objeto de hacerles la vida imposible y que abandonen el lugar o la lucha.
• Persisten las judicializaciones de líderes y lideresas sociales, señalamientos, desapariciones forzosas, asesinatos selectivos y violencia sexual.
• Las investigaciones contra victimarios en las regiones que visitamos siguen en absoluta impunidad y no hay reparación ni a las familias ni a sus comunidades.
• Aterrorizan a la población, controlando estrictamente la movilidad bajo la amenaza de sanciones o asesinatos. Esto muchas veces produce en la comunidad dificultades para acceder a la alimentación y a los servicios de salud.
• Destacamos la conformación de los Frentes de Seguridad Ciudadana, que, impulsados por algunas autoridades civiles, generan una gran alarma en las comunidades por su similitud con las otrora Convivir.
• La crisis humanitaria de la que hemos sido testigos presenta situaciones de gran pobreza y hambre en las regiones visitadas. Falta de inversión efectiva del estado en las regiones en las áreas de salud y educación y en otros derechos básicos, con pésimas instalaciones y sin recursos.
• Hemos constatado un avance fuerte de grupos paramilitares. Es muy frecuente el reclutamiento forzoso de menores y jóvenes como carne de cañón, que son también utilizados para realizar atentados contra instalaciones y personas de procesos sociales.
• Los grupos paramilitares siguen estando al servicio de los intereses económicos en los territorios que están ocupando para el control de las economías del extractivismo, el narcotráfico, recursos naturales en general como el agua y la madera, y el control de las vías de comunicación y el comercio.
• Hemos constatado, tanto el negacionismo de la existencia de esta estrategia paramilitar, como la normalización de la misma, por parte autoridades locales.
• La propuesta de política de paz total es desconocida en muchos territorios.
• Hemos observado la degradación ambiental de las zonas visitadas: ríos contaminados y desaparición de especies, a causa de las fumigaciones y el extractivismo descontrolado.
• El terror generado el paramilitarismo en las comunidades más vulnerables, ha provocado la destrucción del tejido comunitario, de la conciencia colectiva y la memoria.